VICTOR FABREGAT

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La entrada de productos textiles procedentes de los países asiáticos a precios de saldo ha desencadenado todo un proceso de reajuste de las empresas españolas del sector que buscan nuevos factores de competitividad que les permitan mejorar su posicionamiento en el mercado internacional. Son muchos los que apuntan a los textiles técnicos como una alternativa de negocio y una oportunidad única para reconvertir la industria textil tradicional de nuestro país. Una solución que, según Victor Fabregat, director del Centro de Información Textil y de la Confección (Cityc), tiene un alcance limitado en función de la estrategia competitiva que decida asumir cada empresa. En su opinión, el futuro del sector pasa por apostar por la innovación, la cualificación de sus profesionales y por estrechar la colaboración entre todos los agentes implicados en el tejido textil.

Al hablar de la industria textil española me viene a la mente el cuadro de Las Hilanderas de Velázquez. ¿Cree que los empresarios del sector han sabido reconvertir sus viejos talleres y adaptar sus negocios a los nuevos tiempos?

La industria textil ha variado sustancialmente en los últimos años y la imagen actual de las empresas españolas no difiere de cualquier otra actividad manufacturera en un país desarrollado, destacando el elevado grado de automatización de los procesos, logrado gracias a una importante corriente inversora.

El hecho de contar con una tradición de siglos no parece haber sido de mucha ayuda ante la irrupción en el mercado de países que, sin apenas tener experiencia, pueden ofertar sus productos a precios mucho más bajos que los nuestros.

Los países en vías de desarrollo, en especial los asiáticos, han logrado en poco tiempo crear una industria textil/confección muy competitiva, aunque en un contexto de rápida industrialización en la que el textil ha sido privilegiado como sector básico para este proceso, mientras que los países desarrollados han ido derivando hacia un sector textil de mayor valor añadido.

El posicionamiento de la industria textil española en el mercado internacional ¿puede venir definido por la especialización de nuestras empresas en la producción de textiles de uso técnico?

Es indudable que la industria española tiene oportunidades para posicionarse en los mercados internacionales a través de los textiles de uso técnico, aunque ello se limite a unas empresas concretas de determinadas especialidades en este campo.

Los textiles técnicos representan, en opinión de reconocidos profesionales del sector, una alternativa de negocio para las empresas textiles tradicionales y una oportunidad para la diversificación de productos hacia otros técnicamente más avanzados y de mayor valor añadido. ¿El Cityc coincide con esta visión?

Esta capacidad alternativa de los textiles de uso técnico a la que se refiere, como he contestado en la pregunta anterior, tiene un alcance limitado y dependerá de la estrategia competitiva de las empresas, ya que no existe una solución única, sino que depende de cada empresa, del contexto en el que se enmarca y de cada momento concreto.

La aplicación de los textiles técnicos en actividades tan diversas como la aeronáutica, médico-sanitarias, agricultura, deportivas y de ocio ¿permite predecir mejores oportunidades de negocio en unos campos que en otros?

Los textiles de uso técnico se caracterizan por tener una demanda de mayor crecimiento que los textiles convencionales, lo que es una buena base para generar oportunidades de negocio, aunque no es el único factor determinante del éxito en cualquier iniciativa en este campo.

Un gran número de las empresas textiles españolas son de dimensiones reducidas. ¿Cómo afrontan la puesta en marcha de proyectos de I+D+i y la transferencia tecnológica necesaria para alcanzar la competitividad?

La existencia de un importante grupo de Pymes en el sector es un factor que indudablemente se ha de tomar en consideración a la hora de diseñar políticas y estrategias en el campo de la investigación, desarrollo e innovación. Por otra parte, es preciso evaluar las ventajas comparativas derivadas de la organización del sector en clusters que pueden favorecer los procesos de difusión y transferencia de tecnología.

Seguridad laboral, responsabilidad social corporativa, buenas prácticas medioambientales… ¿son factores asumidos por el empresariado español como elementos indispensables para caminar hacia el progreso industrial del sector?

Hablando en términos generales, se puede decir que el ambiente industrial que se respira en torno a la producción textil va propiciando una mayor sensibilidad por los temas citados. Sin embargo, y para ser rigurosos, debemos decir que es preciso considerar las diferencias existentes entre empresas grandes y pequeñas, entre sectores productivos o entre las propias comunidades autónomas.

“EL SECTOR TIENE UNA CLARA NECESIDAD DE INGENIEROS TEXTILES CAPACES DE CUBRIR LOS PUESTOS DE TRABAJO DE MAYOR CUALIFICACIÓN, QUE SERÁN BÁSICOS EN LOS PRÓXIMOS AÑOS PARA LA REORIENTACIÓN ESTRATÉGICA DE LAS EMPRESAS EN UN CONTEXTO GLOBALIZADO”

¿Cómo califica la colaboración existente entre la comunidad científica y universitaria, los centros de investigación, los institutos tecnológicos y las empresas textiles del país?

La red de relaciones entre universidad, centros tecnológicos y empresas es básica si queremos elevar el nivel competitivo de nuestro sector. Si bien es cierto que en este sentido se ha mejorado bastante en los últimos años, aún es necesario realizar un mayor esfuerzo de colaboración para lograr una mejor comunicación y la creación de sinergias entre todos los agentes tecnológicos.

¿La apuesta por la formación es una pieza clave de cara a que el sector textil español evolucione de forma positiva en los próximos años?

El sector fextil sigue una tendencia hacia mayores niveles de tecnificación en todos los ámbitos. En el apartado laboral se está produciendo una caída en los puestos de trabajo de menor nivel que viene acompañada de una demanda creciente en los de mayor cualificación.

Al hilo de esta pregunta, ¿qué papel cree que deben desempeñar los ingenieros textiles en el relanzamiento del sectror?

A tenor de la respuesta que acabo de darle a la pregunta anterior, es lógico pensar que el sector tiene una clara necesidad de ingenieros textiles capaces de cubrir los puestos de trabajo de mayor cualificación y que la actividad de estos profesionales será básica en los próximos años para impulsar la reorientación estratégica de las empresas en un contexto globalizado.

En el mercado europeo, ¿cree que otros países de nuestro entorno han sabido poner en marcha estrategias más acertadas que España para adaptarse a los nuevos escenarios impuestos por la globalización de la economía?

Es indudable que hay países que han seguido estrategias diferentes en el campo textil, pero ello no depende sólo de la voluntad de los empresarios sino que viene condicionado por el entorno macroeconómico, las relaciones exteriores o, simplemente, por la experiencia acumulada a lo largo de los años. En este sentido hay que destacar que nuestra apertura al mercado textil mundial se ha producido recientemente, a partir de la entrada de España en la Comunidad Económica Europea en 1986, con lo que la acumulación de experiencias por nuestra parte es mucho menor que la adquirida por otros socios de la Unión Europea que han tenido más tiempo para adaptarse a los cambios generados en el contexto textil mundial.

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