Tecnología española para el conocimiento de la Tierra y la circulación oceánica
La unidad de control y distribución de potencia (PCDU) es responsable de obtener y acondicionar la energía de los paneles solares para alimentar todos los instrumentos, la aviónica del satélite y las baterías de litio-ion. La unidad de control de propulsión iónica (IPCU) controla y alimenta el sistema de propulsión eléctrica del satélite. Su principal misión es fijar y controlar el empuje del motor eléctrico en función de lo que determine el computador central. Este motor tiene como principal característica su eficiencia y precisión a la hora de proporcionar un empuje muy preciso. El empuje de este motor es equivalente a la fuerza de sostener una masa de un gramo sobre la palma de la mano. Este pequeño empuje permitirá compensar la resistencia aerodinámica que existe a 250 km de altura. Como alternativa a los motores de propulsión química que habitualmente usan los satélites, los motores eléctricos son cada vez más empleados para las operaciones de corrección y mantenimiento de órbita y en misiones interplanetarias debido a su mayor eficiencia. Esta tecnología se basa en ionizar gas xenón y acelerarlo electrostáticamente a través de un campo eléctrico de alto voltaje a una velocidad aproximada de 30km/segundo.