Soluciones de cableado para las redes del laboratorio de luz de Sincrotrón Alba
Las soluciones de cableado de cobre y fibra óptica de Reichle & De-Massari han sido seleccionadas de nuevo para la instalación de red en la segunda fase de la construcción del nuevo Sincrotrón ALBA, el primer sincrotrón de tercera generación en el suroeste de Europa financiado conjuntamente por
Alojado en un edificio con forma de concha de caracol gigante, el nuevo Sincrotrón usa una serie de imanes para guiar electrones en una trayectoria casi circular para generar luz de Sincrotrón. Alrededor del túnel hay una serie de laboratorios experimentales llamados «beamlines» donde cerca de mil científicos residentes e invitados de toda Europa podrán usar la luz del Sincrotrón en una amplia gama de experimentos científicos cuando el complejo sea completamente operativo en los próximos años. Representa la mayor y más significativa inversión en el área de la investigación científica hecha hasta el momento en España.
Cells reconoció desde el primer momento que una red de voz y datos de alto rendimiento libre de errores que garantizara comunicaciones seguras y fiables era un factor crucial para el éxito de la operación en un proyecto tan ambicioso, tanto en su fase inicial como a largo plazo.
La instalación de red en las oficinas de Cells, «beamlines» e instalaciones anexas, construidas y equipadas por la firma de ingeniería Soclesa-Elecnor, se han realizado utilizando las soluciones de cableado de cobre de R&M, seleccionadas por la calidad de componentes, ancho de banda, coste y posibilidades de expansión futura.
Con la primera fase completa y Cells satisfecho con la calidad y fiabilidad de los productos de cableado usados, el consorcio preparó el contrato para la segunda fase – la red informática que controlará el sincronismo del anillo de almacenamiento dentro del Sincrotrón y el equipamiento de almacenamiento de la red de datos. La oficina de R&M en Madrid trabajó estrechamente en colaboración con el integrador de sistemas Ambar Telecomunicaciones, en una propuesta de diseño que fue finalmente seleccionada por Cells.
Los trabajos de la segunda fase ya han comenzado y se prevé que terminen a finales del 2009. El objetivo a largo plazo de Cells es incrementar el número de «Beamlines» operativas de las 7 actuales hasta un máximo de 32. La red requerirá ampliaciones, por lo que R&M y Ambar trabajarán estrechamente para garantizar el soporte necesario.
