Semblanza de Rafael Cantero Carranza, ingeniero técnico industrial y escultor
En esta sección de Fundación y Colegios, además del comentario de las tareas o gestiones que emprenden los diferentes colegios, con frecuencia hemos resaltado también a colegiados que por una u otra razón han destacado en la profesión, ya sea en el ámbito industrial, en el campo empresarial, en la docencia, en la investigación, etcétera, así como aquellos compañeros dignos de mencionar que han sido auto-res de inventos en el campo tecnológico.
En esta ocasión queremos dedicar esta reseña al compañero Rafael Cantero Carranza (Villafruela, Burgos, 1936). Cantero Carranza procede del mundo de la técnica, donde ejerció sus conocimientos de ingeniero técnico, aplicados a la producción industrial. La precisión en el cálculo y en el ajuste, y la acertada manipulación de los materiales, son parte de sus importantes logros en el campo profesional, pero lo que queremos realmente destacar es su condición de artista, sobre todo en el campo escultórico. Se trata, sin lugar a dudas, como les ocurre a tantos otros compañeros con vocación artística, de una polivalencia de la creatividad con el ejercicio de la ingeniería.
En su casi meteórica progresión en la producción artística, ha cultivado, con acierto, materiales diversos, en especial la madera, el bronce y la piedra, así como otros de carácter sintético o artificial. En todos ellos ha dejado buen testimonio de su versatilidad y de sus cualidades escultóricas.
El compañero Cantero Carranza acredita, en sus sucesivos trabajos, ojo certero y mano segura en el manejo de las herramientas, cualidades ambas que permiten caminar a zancadas por el atractivo universo de su plástica, ejerciendo su buen oficio y creatividad.
Parte de su producción se desarrolla en el género de la reproducción: retratos, escenas o grupos. Una de las obras a destacar es la reproducción a escala natural de uno de los relieves románicos del claustro de Silos, lo que le confirma como un eficaz artista de la piedra y el cincel.
Rafael Cantero Carranza puede presumir ahora de que su reproducción en piedra a tamaño natural del relieve de los discípulos de Emaús del claustro de Santo Domingo de Silos, preside la apertura de la muestra Yo camino de Las Edades del Hombre, que se celebra en Ponferrada (León), hasta el mes de noviembre del presente año. En relación con el libro editado en el año 1997 para la exposición conmemorativa del Sínodo Diocesano en Burgos titulado Nuevos caminos sobre viejas sendas, se insertan diversas ilustraciones sobre las obras realizadas por Rafael Cantero, y en concreto el primer trabajo de la copia parcial del claustro de Santo Domingo de Silos representando Los discípulos de Emaús, una talla de medidas 66 x 37,5 x 3 centímetros en madera de nogal blanco (Guatambú).
En uno de los párrafos del citado libro se dice textualmente: “El hecho histórico de Emaús, el relieve románico de Silos y esta humilde copia de un burgalés del siglo XX recogen el deseo del Maestro para su Iglesia: “Poneos en camino”. Es el mismo Cristo, el de entonces y el de hoy, el que descubre a los hombres los caminos de la Iglesia. Los de Emaús son los primeros de “los nuestros”, los que iniciaron ese camino. En su peregrinar se han ido fijando los burgaleses diocesanos que desean continuar con esa misma tarea.”
En el bajo rrelieve se representa a Cristo resucitado, que se aparece a los dos discípulos de Emaús, destacando un poco más la figura del Maestro.
Es digna de destacar, por supuesto, esta inquietud de Cantero Carranza, que en la actualidad la proyecta en el aula taller para el fomento de la educación de adultos y en la que impartirá un curso de talla clásica, al objeto de mantener vivo el oficio de los artesanos. Una vez más, el compañero Rafael Cantero tendrá ocasión de enseñar su maestría y oficio en esta actividad.
