“La invasión de Ucrania ha puesto de relieve la necesidad de incorporar profesionales con conocimientos específicos en determinadas tecnologías”
Manuel Vila es el presidente del Clúster de la Industria de Defensa, que ha promovido la formación de especialistas en Guerra Electrónica.
¿Cuándo y con qué objetivos se creó el Clúster de la Industria de Defensa?
El CID nació en 2019 con la intención de acercar el mundo de la defensa a la empresa, de forma que se incrementara el número de suministradores de bienes y servicios a las Fuerzas Armadas, por un lado, y que desapareciera cierto “respeto mutuo” por el otro, a través del conocimiento mutuo, con especial incidencia en la difusión de la “cultura de defensa” en la sociedad (en la medida de nuestras posibilidades).
¿Cómo pueden contribuir las empresas del sector industrial a la potenciación de la investigación y el desarrollo tecnológico en el ámbito de la defensa?
Hay muchas empresas industriales que ignoran poder disponer de un producto de aplicación en este sector. Pero la tecnología dual impregna el know how de muchas organizaciones, donde ya tienen asentada una dinámica innovadora que mira a otros mercados. Esa contribución es factible, pues, más como un esfuerzo comercial que de cualquier otra índole.
“La tecnología dual impregna el know how de muchas organizaciones, donde ya tienen asentada una dinámica innovadora que mira a otros mercados”
¿Qué papel juegan los ingenieros en este ámbito?
Son los responsables de hacer posibles las nuevas ideas, bajando a tierra los proyectos ambiciosos mediante el desarrollo de las soluciones técnicas adecuadas en la definición del producto, permitiendo la industrialización del proceso o asegurando la calidad de éste en beneficio de la del primero. Eso sin contar con la presencia masivas de dicha profesión en el ámbito comercial (el sector requiere de una venta técnica) o de compras (por la misma razón).
Uno de los objetivos del CID es promover la “cultura de defensa”, ¿qué actuaciones lleva a cabo en este sentido?
Acercar a las empresas la realidad de nuestras Fuerzas Armadas en cada una de las jornadas de trabajo que organizamos es lo más significativo. Pero en estos años se han organizado actividades meramente culturales o deportivas, como regatas con la participación de la Armada o las jornadas de marcha militar Santander 4 Days.
El CID se caracteriza, además, por la diversidad de las empresas, entidades e instituciones que lo conforman, de diferentes tamaños y distintas áreas de actividad. En este contexto, se han constituido diversos grupos de trabajo, ¿cuáles son los más destacados?
Hay muchos, en los ámbitos más variados y destacar alguno en concreto sería injusto hacia los demás. No obstante, quepa destacar, por la reciente renovación de su dirección y en homenaje a sus antiguos responsables, el de construcción naval y el de inteligencia económica.
“Acercar a las empresas la realidad de nuestras Fuerzas Armadas en cada una de las jornadas de trabajo que organizamos es lo más significativo”
Con el objetivo de apoyar a la industria nacional de defensa y contribuir a mejorar las capacidades de nuestras Fuerzas Armadas (FAS) en el campo de la Guerra Electrónica, el Clúster de la Industria de Defensa (CID) ha promovido la creación de unos estudios universitarios de postgrado en este ámbito tecnológico altamente especializado, ¿cómo surgió esta iniciativa y cómo ha sido el proceso hasta la puesta en marcha de estos estudios?
Fue una iniciativa del anterior comité ejecutivo del CID, que surgió de la mano del director del clúster durante la última celebración de Feindef, lugar de encuentro idóneo para todo tipo de iniciativas relacionadas con el mundo de la defensa.
¿A quiénes va dirigido este curso y dónde se imparte?
Aunque está abierto a titulados universitarios o alumnos del último curso de grado en general (incluso a profesionales que reúnan los requisitos de acceso al sistema universitario español), el estudiante tipo es ingeniero de telecomunicaciones, tanto recién graduado como en ejercicio, motivo por el que el curso tiene cierto carácter virtual al ser semipresencial; está basado en la ETSIIT de la Universidad de Cantabria (UC).
¿Cómo se estructura?
Es un curso de experto que sigue las pautas de la UC para los títulos propios a ese respecto. Tiene una parte teórica (21 créditos distribuidos en cinco temas) y otra práctica (5 créditos).
“La defensa es generadora de tecnología puntera, y los ingenieros especializados en la misma tienen cabida en otros sectores demandantes de alta preparación”
¿En qué momento se encuentra la demanda de estos profesionales, teniendo en cuenta la situación bélica actual?
Siendo, en general, la demanda de todo tipo de ingenieros casi una constante desde los años noventa del pasado siglo, se da la circunstancia de que la invasión de Ucrania ha puesto de relevancia la necesidad de incorporar a la cadena de suministros de las Fuerzas Armadas profesionales con conocimientos específicos en determinadas tecnologías de aplicación en la defensa. No es, de todas formas, una demanda coyuntural. La defensa es generadora de tecnología puntera, y los ingenieros especializados en la misma tienen cabida en otros sectores demandantes de alta preparación: la defensa es un motor de innovación, pero no un compartimento estanco.
¿Qué proyectos tiene a la vista el Clúster de la Industria de Defensa?
Queremos facilitar la incorporación de compañías consolidadas en el suministro a Defensa, y la aproximación de empresas cuya actividad en el sector sea proporcionalmente pequeña (o incluso inexistente, si tienen tecnología o producto susceptible de adaptación a las necesidades de Defensa), para dotar a las Fuerzas Armadas de una base industrial y tecnológica propia (independiente, podríamos decir), adecuada a las necesidades nacionales.
En 2023 pretendemos, además: 1) consolidar la interlocución de nuestras empresas con el Ministerio, la Armada y los Ejércitos; 2) dotarnos con una estructura mínima para hacer llegar las convocatorias de las administraciones públicas nacionales y europeas a nuestros asociados; 3) favorecer la presencia de las empresas del CID en las ferias españolas con un stand propio; 4) intentar extender la experiencia del curso de experto en guerra electrónica a otro tipo de materia de gran interés de la mano de la UC, y 5) coordinar nuestra actividad con otras asociaciones nacionales y clústeres regionales para una mejor optimización de los recursos… etc.