La Ingeniería Técnica reclama una Ley de la Ingeniería que ponga orden a la situación actual
El INGITE (Instituto de Graduados en Ingeniería e Ingenieros Técnicos de España), del que forma parte el COGITI, ha hecho público el informe “Análisis de los Estudios de Ingeniería en España”, con los datos que arrojan las estadísticas que ofrece el Ministerio de Universidades en relación a los matriculados y egresados en las titulaciones de Ingeniería.
Los datos que se desprenden, entre otros, son los siguientes:
- Las vocaciones en Ingeniería (alumnos matriculados) descienden un 40% en los últimos 20 años (del curso 2002-2003 al curso 2022-2023).
- Mientras que el número de títulos de Grado en Ingeniería (1074) representan el 24,3% del total, y los títulos de Máster (1.158) el 21% del total, los matriculados en Ingeniería son el 12,72% y los egresados en Ingeniería el 7,5% del total de las titulaciones universitarias, reduciéndose a la mitad en los últimos 20 años.
- Proliferan las titulaciones de Grado en Ingeniería no habilitantes (458), habiendo aumentado un 48,2% en los últimos 8 años.
- Ya hay más de 200.000, entre titulados y matriculados en Grados de Ingeniería no habilitantes, que no pueden ejercer como ingenieros, generando frustración, pérdida de oportunidad y nuevos sacrificios, lo que no ocurre con el resto de titulados europeos que vienen a España.
- La tasa de abandono en los Grados de Ingeniería se sitúa cercana al 50%.
Es por ello que, desde el INGITE, se solicita una Ley de la Ingeniería que, entre otras cuestiones, recoja lo siguiente:
- Se proteja el nombre de las titulaciones en Ingeniería a aquellas que cumplan con unos contenidos mínimos y que, a su vez, permitan el acceso a las profesiones reguladas, ya sea de forma total o parcial. (No existen titulaciones de Farmacia, Veterinaria, Enfermería, Medicina, Derecho, etc., que luego no te permitan acceder a dichas profesiones).
- Se actualicen las atribuciones profesionales de los titulados en Ingeniería de las diferentes ramas, de tal forma que estén basadas en competencias y no en el uso, además de que habrán de recoger las competencias individuales de los profesionales, adquiridas a través de la experiencia y la formación continua; estableciendo un modelo dinámico y competitivo de atribuciones profesionales, con procedimientos objetivos y desde las corporaciones colegiales.
- Se elimine la enorme e improductiva conflictividad en materia de atribuciones profesionales entre las Ingenierías, y entre la Ingeniería y la Arquitectura, con modelos basados en la responsabilidad y las competencias individuales.
- Se confluya en un único y moderno nivel profesional de Ingeniería como en el resto de los países a nivel mundial, con base en las titulaciones de Grado y el DPC (Desarrollo Profesional Continuo).
- Se construya una estructura colegial que aglutine todas las ramas de la Ingeniería, y que entre todos se ponga en valor la Ingeniería como instrumento fundamental para el desarrollo de la sociedad.
- Que consiga mejorar las condiciones laborales y profesionales de los/as Ingenieros/as, acordes con la responsabilidad y el esfuerzo en el acceso a dichas profesiones.
- Que impulse las materias de tecnología en secundaria y bachillerato y que dé visibilidad a la Ingeniería en su conjunto.
Más información en www.cogiti.es.