José García Gómez

Compatibilizar la sostenibilidad ambiental y económica es probablemente el gran reto que tenemos por delante

A punto de cumplir los cien años de existencia, la Agrupación de Industrias Alimentarias de Murcia, Alicante y Albacete (AGRUPAL) es todo un referente de la industria alimentaria murciana, que presta servicios integrales a casi un centenar de empresas conserveras y de alimentación.

Agrupal representa un amplio número de subsectores de la industria alimentaria, como son los transformados de frutas y hortalizas, zumos, congelados, cítricos, aceitunas y encurtidos, salsas, bebidas, ahumados y salazones, especias, platos preparados, dulces y caramelos, productos de panadería y bollería, vinagres, productos ecológicos o patatas fritas y snacks, entre otros.

De este modo, las empresas que integran la Agrupación potencian sinergias colaborativas y oportunidades de negocio, lo que contribuye, en palabras de su presidente, José García Gómez, a que sean más competitivas y logren un mayor desarrollo.

A lo largo de esta entrevista, charlamos con él para conocer las principales claves de esta relevante Agrupación de Industrias Alimentarias, y las actividades e iniciativas que está previsto llevar a cabo para conmemorar el centenario de su fundación, con diversas jornadas empresariales y culturales, entrega de premios, una exposición exterior de gran formato o una gran Gala de la Industria Alimentaria a final de año, entre otras.

Fundada en 1924, ¿cuál es el origen de Agrupal?
Los primeros registros reflejan actividad empresarial en nuestro sector desde 1885 con pequeñas instalaciones que se dedicaban a envasar para su conserva frutas y hortalizas. El 14 de diciembre de 1924 se constituye la Agrupación de Conserveros de las provincias de Alicante, Albacete y Murcia, germen de Agrupal, con el objeto de aglutinar los intereses de las florecientes empresas de la época e intentar dotar de cierto orden al sector en aquel momento.

Trabajamos en proyectos de innovación, cambio climático y nuevas tecnologías, sin olvidar el apoyo a la internacionalización

¿Cómo ha sido su evolución hasta llegar al momento actual en el que integra a más de 80 industrias alimentarias?
El sector ha experimentado una gran transformación en estos 100 años. La industria conservera de los años 20 ha ido evolucionando hasta una industria alimentaria innovadora con gran variedad de subsectores pujantes, abarcando a zumos y bebidas, golosinas, congelados, salazones, salsas, especias, conservas de frutas y vegetales, etc. Por el camino hemos superado una guerra civil, una dictadura, la convergencia a la Unión Europea con el impulso exportadora que ello supuso, varias crisis económicas y una pandemia global, sin perder el espíritu emprendedor e innovador de las empresas de la Región y la impronta de calidad que siempre ha acompañado a los productos murcianos.

La evolución de la industria alimentaria ha sido la propia de la Región de Murcia, favoreciendo el desarrollo de núcleos de población.

En la actualidad, Agrupal presta servicios integrales a casi un centenar de empresas conserveras y de alimentación. ¿Cómo es la ayuda y el apoyo que se presta desde la Agrupación?
El principal objetivo de la Agrupación es defender los intereses de nuestras empresas y ayudarlas a conseguir sus objetivos. Para ello disponemos de un amplio catálogo de servicios, que van desde la formación hasta la implantación y seguimiento de certificaciones en seguridad alimentaria, calidad y prevención de riesgos laborales. También trabajamos en proyectos de innovación, cambio climático y nuevas tecnologías, sin olvidar el apoyo a la internacionalización, la gestión de ayudas y la adaptación al desarrollo legislativo tan ingente que sufre el sector.

¿Qué porcentaje representa la industria alimentaria en el conjunto de la producción industrial de la región? ¿Y en lo referente al volumen de negocio?
La industria alimentaria de la Región de Murcia representa un tercio del PIB industrial regional, aportando el 4,7 del VAB, con un volumen de negocio de 8.696 millones de euros en el pasado año. Son cifras significativas, dado que nos están permitiendo cifras de exportación superiores a los 2.000 millones de euros, lo que representa mas del 20% de las exportaciones no energéticas.

Las cifras directas de empleo del sector rondan los 27.000 empleados, casi el 30% del empleo industrial en nuestra región

¿Qué cifras de empleo se manejan en este sector?
Las cifras directas de empleo del sector rondan los 27.000 empleados, casi el 30% del empleo industrial en nuestra región. A esa cifra hay que añadir los empleos generados por la industria alimentaria en todos los sectores auxiliares, como el transporte, embalaje, etc.

¿Cuáles son las principales dificultades y desafíos a los que se enfrenta la industria alimentaria?
Compatibilizar la sostenibilidad ambiental y económica es probablemente el gran reto, no solo de la industria alimentaria, sino de la industria española en general. En nuestro sector, añadimos la importancia de vigilar la seguridad alimentaria y el cumplimiento de las expectativas de nuestros clientes, con productos innovadores, saludables y compitiendo en un mercado globalizado.

¿Qué tendencias actuales destacaría en lo que concierne a la innovación y las nuevas tecnologías aplicadas a la industria alimentaria?
El sector está aplicando las tendencias globales derivadas de la transformación digital, como la IA, internet de las cosas, robótica, blockchain, big data, etc., lo que está permitiendo líneas de producción mas eficientes, mejora en la cadena de suministro, tanto en trazabilidad como en predictibilidad, así como una optimización de recursos e incremento de la sostenibilidad.

Aterrizando en la industria alimentaria, se están realizando desarrollos importantes en envases inteligentes, que permitan monitorear el estado de conservación de los alimentos, aditivos alimentarios que realizan una liberación controlada de nutrientes, sensores de detección de patógenos, sin olvidar las tecnologías de impresión 3D que nos proporcionan nuevas formas y texturas o la alta demanda de los alimentos funcionales enriquecidos con ingredientes que pueden fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la digestión o reducir el riesgo de enfermedades crónicas.

¿Cómo ve el binomio entre la agricultura y la industria?
En la Región de Murcia, el binomio agricultura e industria ha sido un binomio de éxito. Hemos sido necesarios y complementarios el uno para el otro, y creemos firmemente que debe seguir siendo así. Compartimos muchas de las demandas del sector primario y necesitamos una agricultura regional sólida, que nos aporte los alimentos de calidad a los que la industria alimentaria añade valor.

En lo que respecta a los cambios legislativos que están entrando en vigor y que afectan a la industria agroalimentaria, ¿considera que el marco jurídico actual es, en algunos aspectos, demasiado estricto y prolijo?
En la industria alimentaria estamos siendo víctimas de un desmesurado desarrollo legislativo, a veces imposible de cumplir. Los recursos necesarios para la tramitación y puesta al día de todos los requisitos legales que nos atañen nos restan competitividad en el mercado global en el que desarrollamos nuestra actividad.

No podemos evitar la sensación de que algunas normas están realizadas desde el desconocimiento del mercado y el funcionamiento real del tejido empresarial. El desarrollo de La Ley de la Cadena Alimentaria es un buen ejemplo de ello, y lejos de promover el equilibrio entre los distintos eslabones, está generando tensiones y pérdidas de productividad en todos ellos.

En líneas generales, ¿cómo está siendo el comportamiento de la industria alimentaria en los últimos años?
Están siendo años muy complicados, que hemos enfrentado con valentía y ahí están los resultados. Frente a situaciones tan desconocidas como una pandemia, la industria alimentaria ha sido capaz de sortear los problemas de suministro, producción y comercialización, y hemos garantizado el abastecimiento de la población. El episodio de encarecimientos energéticos y de materias primas ha vuelto a poner el sector en situaciones límite, pero se ha sabido responder y estamos satisfechos. Seguimos ampliando mercados, exportando ya a más de 180 países, y hemos sido capaces de mantener las cifras de empleo, añadiendo tecnología e innovando en nuestros productos.

¿Han cambiado los gustos y los productos que demandan los clientes?
El mercado está en un proceso de cambio continuo. Los clientes demandan productos cada vez mas saludables, con niveles de seguridad alimentaria más elevados, y valoran significativamente el impacto medio ambiental y social de nuestras cadenas de producción.

En la industria alimentaria estamos siendo víctimas de un desmesurado desarrollo legislativo, a veces imposible de cumplir

¿Es posible luchar contra un escenario tan adverso como el provocado por la inflación y el encarecimiento de las materias primas?
Está suponiendo un gran esfuerzo. Nuestras empresas apenas han repercutido el incremento de costes. Se ha realizado una inversión importante en optimizar las cadenas de producción, desde el suministro energético con la incorporación de energías renovables hasta la automatización de procesos que permitan una mayor eficiencia en la producción.

¿Cómo se imagina este sector dentro de 10 o 15 años?
Imaginamos un sector fuerte, dotado de innovación y tecnología, y responsable con el medio ambiente y con la sociedad. Estamos trabajando para que sea así. Conseguir la soberanía alimentaria, o al menos reducir la dependencia exterior, está al alcance de pocos países y el nuestro es uno de ellos, no podemos dejar pasar la oportunidad.

Este año, Agrupal está de celebración, ya que se conmemora el centenario de su fundación, ¿cuáles son las actividades más destacadas que se van a llevar a cabo?
Hemos preparado un centenario abierto a la sociedad murciana. Los últimos 100 años de la Región de Murcia no se pueden entender sin el desarrollo de la industria conservera y su evolución hasta la industria alimentaria actual.

Para recorrer ese camino, miles de familias murcianas han contribuido con su esfuerzo y esta es una gran ocasión para mostrar ese reconocimiento a todos ellos. Se han programado diversas jornadas empresariales y culturales, que tienen su base en la publicación de un libro “Agrupal, 100 años de la Industria Alimentaria de la Región de Murcia”, en el que se va a plasmar esa historia desde la perspectiva económica y empresarial, pero también desde el ámbito laboral y social, así como desde la visión tecnológica y de expansión internacional.

Vamos a reconocer a las industrias más destacadas con la puesta en marcha de la primera edición de los “Premios de la Industria Alimentaria de la Región de Murcia”, y también destacaremos, en colaboración con las 3 universidades murcianas, los trabajos de los estudiantes que mayor impacto pueden tener en nuestro sector.

Completaremos las celebraciones con una exposición exterior de gran formato presente en las calles de Murcia, en la que podremos visualizar las imágenes más representativas de lo acaecido en estos 100 años de vida, y una gran Gala de la Industria Alimentaria a final de año.

Por último, ¿cuáles son sus próximos proyectos?
El objetivo es ampliar el número de empresas que forman parte de Agrupal para hacer una agrupación más fuerte, que pueda atender y defender las necesidades del sector.

Tenemos en cartera proyectos relacionados con la adaptación al cambio climático y un gran proyecto de innovación colaborativa, en el que las empresas puedan colaborar para poner en marcha iniciativas de forma conjunta aprovechando la diversidad del sector.

“Los últimos cien años de la Región de Murcia no se pueden entender sin el desarrollo de la industria conservera y su evolución hasta la industria alimentaria actual