Desarrollan materiales inteligentes para actuar en el espacio
La clave de ello son los materiales que se utilizan, que poseen una característica singular: la memoria de forma. «Cuando se les aplica electricidad o calor se contraen, de manera similar a como ocurre con las fibras humanas cuando lo manda el cerebro, explica el presidente de la compañía Diego Fernández Infante. Esta propiedad es la que permite sujetar la pieza durante el lanzamiento para, una vez en órbita, liberarla con tan solo activar una señal eléctrica.
La solución que propone Arquimea ha sido patentada patentada y bautizada como Smarq. Tras casi una década de trabajo y ensayos en el laboratorio, el primer producto basado en esta tecnología será probado en órbita en 2016, previsto en el marco de una serie de experimentos que se llevarán a cabo en la Estación Espacial Internacional. Antes, los investigadores deberán probar el dispositivo en condiciones de microgravedad a bordo de vuelos parabólicos.