La microempresa acorta distancias en la adopción de equipamiento TIC básico
Entre sus conclusiones está que existe una tendencia general a la reducción de la brecha digital que separa las microempresas de las pymes y grandes empresas, gracias al esfuerzo que muchas de ellas están realizando para incorporar las TIC a sus procesos de negocio. En este sentido, las medidas recogidas en el Plan de TIC en pyme y comercio electrónico incluido en la Agenda Digital para España están actuando como impulsoras de la adopción de las nuevas tecnologías, fundamentalmente entre las microempresas.
Sin embargo, en lo que respecta a la penetración de la página web, el objetivo de llegar al 55% de las microempresas en 2015 está lejos de alcanzarse. Del informe se desprende que las empresas encuentran dos barreras principales: el coste en el que deben incurrir para lograr posicionarla en los buscadores y el tiempo necesario para mantenerla actualizada, lo que en sectores como el comercio minorista exige una revisión continua de productos y precios. Ambos factores están detrás del descenso en el uso de la página web y de que esta no sea vista como una herramienta tecnológica útil. Algo similar ocurre con las redes sociales, al exigir un tiempo y una dedicación que no todas las empresas pueden permitirse.
En cuanto al cloud computing, que permitiría a las microempresas utilizar muchas tecnologías a precios muy razonables, las empresas muestran aún un importante rechazo y desconfianza, que tienen su origen en el desconocimiento y la falta de formación en TIC de los responsables empresariales. Estos reconocen no tener los conocimientos suficientes para estar al día de los avances tecnológicos, y también que esta formación no es una prioridad para ellos, al no ser específica para sus procesos de negocio, por lo que tampoco se la ofrecen a sus empleados.
El Informe ePyme 2014 deja patente el interés del tejido empresarial español por incorporar las nuevas tecnologías, pero esta adaptación supone un esfuerzo importante en tiempo y dinero, por lo que es fundamental continuar con las labores de sensibilización, particularmente entre las microempresas, y también ofrecerles la formación y la información necesarias, así como las ayudas y los incentivos para que sean capaces de sacar el máximo provecho de las TIC.