Jardín Botánico de la Universidad de Valencia
Este pequeño jardín urbano con vocación científica y docente condensa 300 millones de años de historia evolutiva de las plantas en el lapso de un paseo
Los jardines botánicos son, sin duda, excelentes lugares para obtener respuestas. Lo son para conseguirlas a partir de la lectura paciente de un libro bajo la sombra de uno de sus árboles. También son espacios para las respuestas que provienen de la introspección a la que invita su solitud, o del diálogo provechoso con un amigo sabio. Pero, por encima de todo, son recintos para adquirir respuestas a preguntas formuladas a la propia Naturaleza; es decir, son lugares de ciencia.
El Jardín Botánico de la Universidad de Valencia está concebido para ese fin, y no resulta nada difícil encontrar entre la diversidad de plantas que lo habitan conceptos científicos tan interesantes como evolución, convergencia adaptativa y especiación. ¿Cómo han evolucionado las plantas a lo largo de su historia sobre la Tierra? ¿Qué soluciones han encontrado cada una de ellas para combatir las condiciones adversas de su hábitat como falta de luz solar o de lluvias?
Un jardín en pleno centro histórico
Inaugurado en 1806 (aunque hubo experiencias muy anteriores), el Jardín Botánico de la Universidad de Valencia fue totalmente recuperado a principios de los años 90 del siglo pasado después de que el abandono y la riada de 1957 lo dejaran en mal estado. Es un jardín urbano, de reducidas dimensiones (50.000 m2) y con una diversidad elevada de plantas y colecciones. Es un típico jardín universitario de los que surgieron en el siglo XVI en la Europa renacentista con una clara vocación docente. Hace 200 años se instaló en el Huerto de Tramoyeres, fuera de las murallas de la ciudad, pero el crecimiento de ésta ha llegado a envolverlo y actualmente se encuentra en el centro histórico de Valencia.
En el Jardín Botánico de la Universidad de Valencia hay 20 colecciones distintas de plantas. La que ocupa mayor extensión es la Escuela Botánica, que es tan antigua como el propio Jardín. Además, existen 19 colecciones monográficas, que responden a tres criterios principales: plantas utilizadas por el hombre, plantas cultivadas bajo protección o plantas del mismo ambiente ecológico.
Escuela Botánica
En cuanto a la Escuela Botánica, a lo largo de sus 16 cuadros se puede observar la diversidad actual de las plantas después de vivir más de 300 millones de años sobre la superficie terrestre. En este tiempo los procesos de extinción y formación de especies han sido muy intensos y en la actualidad sobre nuestro planeta hay más de 250.000 especies distintas, que aún siguen en constante evolución y de las que en la Escuela Botánica del Jardín se muestra una variada representación.
El recorrido ordenado permite observar la evolución de los vegetales y ver los cambios de las estructuras florales, la reducción del tamaño de las flores y la aparición de las inflorescencias, el paso de la polinización por el viento (anemogamia) al uso de los insectos como transportadores del polen (entomogamia), la reducción de la estructura vegetativa y el tránsito de los grandes árboles a las hierbas. 300 millones de años de historia evolutiva reducidos al lapso de un paseo.
El resto de colecciones incluyen extensas compilaciones de palmeras, plantas acuáticas, plantas tropicales, invernaderos de exhibición de plantas insectívoras, helechos, orquídeas y bromeliáceas.
También existe una interesante colección de especies esciófilas (plantas que se han adaptado a un ambiente umbrío), otra de plantas crasas (adaptadas a la aridez), una representación de la flora valenciana, una rocalla de endemismos del Mediterráneo que permite entender el fenómeno de la especiación y una compilación de plantas trepadoras.
Estufa tropical
Pero además de plantas, el interés científico del Jardín Botánico de Valencia incluye también su arquitectura. A cualquier visitante sensibilizado con la materia le gustará conocer que la estufa tropical del jardín fue un alarde tecnológico en la España de mediados del siglo XIX y constituye una obra singular construida en el inicio del uso del hierro como material constructivo.
Una última zona interesante que merece una mención es El Bosque. Se trata de una quimera, una floresta irreal, en la que se han plantado árboles de gran tamaño, los más característicos de algunos bosques de la Tierra. Un buen lugar para terminar la visita y reírnos con la ocurrencia del escritor francés Jean-Baptiste Alphonse Karr: “La botánica no es una ciencia; es el arte de insultar a las flores en griego y latín”
MÁS INFORMACIÓN
Jardín Botánico de la Universidad de Valencia
Dirección:
Quart, 80. 46008 Valencia
Internet:
www.jardibotanic.org
Teléfono:
963 156 800 / 963 156 817
Horario general:
Abierto todos los días excepto los lunes, el 25 de diciembre, el 1 de enero y todos los días de lluvia y viento. De noviembre a febrero: de 10:00 a 18:00 h. Marzo y octubre: de 10:00 a 19:00 h. Abril y septiembre: de 10:00 a 20:00 h. De mayo a agosto: de 10:00 a 21:00 h.
Precio:
60 céntimos. Entrada gratuita para estudiantes, jubilados y menores de 7 años.€
Inauguración:
1806
Director:
Antoni Aguilella i Palasí
Existe una ruta llamada Las Plantas de Cavanilles que se puede seguir con la ayuda de un tríptico y las señales que hay por todo el jardín.