En un reciente congreso celebrado en Francia, los fabricantes de automóviles y los centros de I+D de motores han recalcado que las tecnologías actuales permiten pensar que el grado cero de contaminación es un objetivo alcanzable en unos cinco años. Para ello se investiga en la combustión autoinflamación controlada de gasolina y la combustión homogénea para el gasóleo. En el campo del diesel, Toyota ha introducido un procedimiento llamado Unibus que reduce la contaminación de este combustible. Fiat explora el aporte de una distribución variable, con pilotaje electrohidráulico, a su sistema de inyección. Lotus expuso su idea de un motor sin árbol de levas y 100% eléctrico y Johnson Control apuesta por el pilotaje electromagnético de las válvulas para facilitar el control de la auto-inflamación.
