Rayos de sol para la limpieza fotocatalítica del agua contaminada
Un grupo de investigadores del Centro Alemán del Espacio Aéreo de Lampoldshausen ha conseguido limpiar los residuos químicos del agua utilizando la radiación ultravioleta de la luz solar
En un mundo marcado por la escasez de agua, cada vez se destinan más recursos a encontrar sofisticados sistemas para tratar de purificar y aprovechar la que existe. ¿Sofisticados sistemas, dijimos? Quizá no tanto. Un equipo de investigadores del Centro Alemán del Espacio Aéreo (DLR) de Lampoldshausen ha conseguido limpiar los residuos químicos del agua utilizando simplemente los rayos del Sol.
Los rayos ultravioletas llevan tiempo siendo utilizados como desinfectantes en las plantas de tratamiento de aguas. Si el agua es lo suficientemente clara para no absorber los rayos, exponerla a una descarga de una lámpara ultravioleta, o a los rayos ultravioleta que hay en la luz solar, es suficiente para destrozar el ADN de los virus y bacterias que residen en ella y que podrían ser peligrosos y transmitir enfermedades si el agua es consumida.
Pero los investigadores alemanes han ido un poco más allá, al conseguir eliminar no sólo virus, sino también residuos químicos mucho más resistentes, en una máquina capaz de utilizar el Sol como dispositivo purificador a escala industrial.
El Centro del Espacio Aéreo necesita purificar el agua que utiliza para enfriar sus motores experimentales y que se contamina con el combustible y las sustancias producidas en la combustión del fuel que se utiliza en los programas espaciales.
Para lograr eliminar la contaminación tanto orgánica como inorgánica -formada por compuestos químicos mucho más difíciles de romper y purificar- los investigadores recurrieron al truco de aumentar el efecto limpiador de los rayos ultravioleta utilizando un catalizador que se activa a través de la luz.
En realidad, han creado dos tipos de procesos de fotocatálisis distintos en función del grado de contaminación, uno para el agua que está ligeramente contaminada y otro para aquella que presenta mucha polución.
LOS INVESTIGADORES ALEMANES HAN IDO MÁS ALLÁ, AL CONSEGUIR ELIMINAR NO SÓLO VIRUS, SINO TAMBIÉN RESIDUOS QUÍMICOS MUCHO MÁS RESISTENTES, EN UNA MÁQUINA CAPAZ DE UTILIZAR EL SOL COMO DISPOSITIVO PURIFICADOR A ESCALA INDUSTRIAL
El centro de la tecnología lo constituye un receptor solar formado por tuberías de vidrio transparente. Para el agua que presenta altos niveles de contaminación se utilizará iones de hierro como catalizadores para -junto con pequeñas cantidades de peróxido de hidrógeno y ácido sulfúrico- acelerar el proceso de destrucción de moléculas contaminantes.
Tuberías purificantes
Para las aguas con menos contaminación se sigue el mismo proceso, pero con la diferencia de que las tuberías están cubiertas con una capa de óxido de titanio, que actúa como un semiconductor que juega con la carga negativa de los electrones convirtiéndola en positiva para crear una estructura que hace las veces de un poderoso oxidante con funciones purificantes.
Los investigadores afirman que, utilizando estos procesos, se pudo purificar agua manchada de contaminantes como agentes farmacéuticos, hormonas u otros elementos muy tóxicos. En ambos procesos se produce agua tan limpia que podría ser utilizada para su consumo o ser vertida en un río.
El aparato es capaz de limpiar 4.500 litros de agua en tan sólo dos horas y se espera que su funcionamiento sea aún más efectivo en países donde existan temperaturas más cálidas y una mayor radiación solar. El dispositivo podría instalarse también en edificios industriales o residenciales y ya se han iniciado los trámites para su comercialización.
De momento, supone el primer paso para un sistema limpio, totalmente ecológico, que se basa en procesos naturales y en la energía inagotable del Sol para limpiar el agua.