Herramienta que permite producir agujeros achaflanados en una única operación
La broca para achaflanar puede utilizarse con una o dos plaquitas para achaflanar, en función de los requisitos de la operación. El uso de dos plaquitas para achaflanar produce virutas más delgadas y, por tanto, está recomendado para aplicaciones con avance de mediano a grande, en condiciones inestables o cuando es necesaria una gran anchura de chaflán. Por el contrario, una única plaquita para achaflanar proporciona una viruta más gruesa y, por consiguiente, optimiza la rotura de la viruta en aplicaciones estables, con un avance y una anchura de chaflán reducidos.
Además, hay disponible una amplia gama de tamaños de plaquita. Es recomendable utilizar la misma velocidad de avance al mecanizar con la plaquita para achaflanar. Esto es importante, especialmente al taladrar un agujero ciego, porque una reducción del avance puede producir virutas largas, no deseadas, en la operación de taladrado.